Esta prueba mide el promedio de azúcar en la sangre de los últimos 3 meses. Es clave para saber si una persona con diabetes está bien controlada o si existe riesgo de desarrollarla.
Este análisis de sangre que mide el nivel promedio de glucosa en la sangre durante los últimos dos o tres meses. Se utiliza para diagnosticar la diabetes y la prediabetes, así como para monitorear el control de la diabetes.